IA EN RESIDENCIAS
Según la OMS, el 15% de los mayores de 60 años sufre algún tipo de trastorno mental. La inteligencia artificial puede cambiar esta realidad.
En muchas residencias de Europa, como las gestionadas por la organización Mijzo en los Países Bajos, la inteligencia artificial ya forma parte del equipo asistencial. En abril de 2022, comenzaron a usar un sistema de visión artificial que monitorea de forma continua los movimientos de los residentes. Sin cámaras invasivas ni grabaciones. Solo datos anónimos y alertas cuando realmente se necesita actuar.
En uno de estos centros, se detectó que un residente se había caído durante la noche. El sistema envió una alerta en cuestión de segundos. Gracias a esto, el personal pudo actuar de inmediato y evitar complicaciones. Es un sistema diseñado para entender lo que está pasando en tiempo real.
🧬 ¿Qué puede hacer la IA en una residencia?
La inteligencia artificial no sustituye a los cuidadores, los apoya. En residencias, sus aplicaciones más destacadas son cada vez más sofisticadas y específicas. Entre las más relevantes se encuentra la detección de caídas en tiempo real, lo que permite intervenir en los primeros minutos tras el incidente, reduciendo drásticamente las consecuencias físicas y psicológicas.
También permite el seguimiento continuo de rutinas de sueño, desplazamientos y comportamientos diarios, identificando cambios que pueden indicar alteraciones en el estado de salud. Por ejemplo, un aumento en los despertares nocturnos o una reducción de la movilidad pueden ser señales tempranas de deterioro físico o cognitivo.
La IA también gestiona el envío de alertas precisas al personal, evitando sobresaturación de información y priorizando lo realmente urgente. Esto se traduce en una mejor organización del trabajo, menos estrés y una atención más eficiente. Además, al eliminar las falsas alarmas que en los sistemas tradicionales pueden llegar al 70% se mejora la confianza del personal en el sistema, permitiéndoles actuar con mayor seguridad.
Y todo esto se realiza respetando la privacidad de los residentes no se almacenan imágenes ni se usan datos personales sensibles. La inteligencia artificial actúa como una capa silenciosa de protección, siempre presente, pero sin invadir.
La inteligencia artificial no sustituye a los cuidadores, los apoya. En residencias, sus aplicaciones más destacadas son:
- 🛏 Detección de caídas en tiempo real, sin necesidad de llevar dispositivos en el cuerpo.
- 🕒 Seguimiento de rutinas de sueño y movimiento, detectando alteraciones que podrían indicar problemas de salud.
- 📲 Notificación inmediata al personal asistencial solo en situaciones reales, evitando interrupciones innecesarias.
- 📉 Prevención proactiva al identificar patrones de riesgo antes de que ocurran incidentes.
Estudios recientes en Europa muestran que los sistemas de IA en residencias:
- Redujeron los tiempos de respuesta médica en eventos nocturnos hasta en un 40%.
- Disminuyeron las falsas alarmas en un 95% comparado con sensores tradicionales.
- Mejoraron la planificación de cuidados gracias a un conocimiento más profundo del comportamiento de cada residente.
Estudios recientes en Europa muestran que los sistemas de IA en residencias han reducido los tiempos de respuesta médica en eventos nocturnos hasta en un 40%, una diferencia crucial cuando se trata de caídas o situaciones de riesgo para la vida. Además, se ha observado una disminución de falsas alarmas de hasta un 95% en comparación con sensores de movimiento convencionales.
Otro de los beneficios tangibles es la mejora en la planificación de cuidados. Gracias al análisis de datos, el personal sanitario puede entender mejor los hábitos de cada residente, anticiparse a posibles crisis de salud y adaptar los protocolos a las necesidades reales. Esto también ayuda a establecer indicadores de bienestar y calidad de vida, algo clave en un entorno donde la atención personalizada es cada vez más demandada.
Las familias, por su parte, reciben información transparente y objetiva sobre el estado de sus seres queridos, lo que genera mayor confianza en la institución. Saber que su familiar está monitorizado con un sistema inteligente que alerta solo cuando es necesario aporta una tranquilidad que va más allá de la tecnología.
En definitiva, más seguridad, más calidad de vida y más tranquilidad para las familias.
Como decía Einstein:
“La mente que se abre a una nueva idea jamás volverá a su tamaño original.”